El pasado marzo, el Ayuntamiento de Madrid presentó el Laboratorio IoT, una colaboración público-privada para la integración del Internet de las Cosas en la gestión municipal. Esta iniciativa surge de la sinergia entre el Consistorio madrileño, la Universidad Politécnica de Madrid (con el laboratorio ubicado en su campus de Montegancedo) y el Foro de Empresas por Madrid. Su enfoque abierto se basa en la colaboración con empresas, emprendedores, técnicos y ciudadanos.
Objetivos y benificios del IoT
El laboratorio busca optimizar la gestión de datos de dispositivos municipales, facilitando la toma de decisiones eficientes. El objetivo es establecer un protocolo de estándares abiertos e interoperables en el Internet de las Cosas, como parte de la estrategia municipal Madrid Capital Digital presentada en 2022.
Los beneficios de IoT (Internet de las Cosas) en una ciudad son amplios. Entre los más conocidos están detectar estacionamientos libres hasta optimizar iluminación, cruces peatonales activos y contenedores inteligentes, pero hay muchos más aplicables a todos los ámbitos de la gestión del día a día de una gran ciudad o núcleo urbano.
En una fase inicial, el laboratorio se ha centrado en la interoperabilidad en su propio entorno y en la UPM. Posteriormente, se aplicará en siete espacios urbanos de Madrid. Se espera que tres de ellos estén operativos a finales de este mismo año 2023